Desde los tiempos de Carpanta, un pollo asado es en este país un icono de la comida festiva, deseada: un pollo asado para los domingos, un pollo asado para una comida en familia, un pollo de corral para celebraciones navideñas o picnics…En cualquier caso, siempre hay un pollo asado en el centro de la mesa. Da juego, es sencillo y gusta a todo el mundo.
Hoy- ¡qué novedad!- te traemos una idea más para prepara un buen pollo asado, pero esta receta, además de estar muy buena, tiene el valor de ser intercambiable: pruébala con un pato, un capón, unas codornices, unos picantones o con un magret bien jugoso. Seguro que repites.
Ingredientes para 4 personas:
Un pollo de unos 2 kilos.
3 o 4 naranjas grandes
Una cucharada sopera de miel
Romero, salvia, semillas de cilantro, un anís estrellado, unas cuantas pasas.
Un diente de ajo
Ralladura de una naranja
Aceite de oliva, sal, pimienta.
Preparación:
Lava el pollo bien y coloca en su interior media naranja, un diente de ajo con piel y algo de salvia fresca. Salpiméntalo.
Una vez caliente el horno, introdúcelo rociado con un poco de aceite de oliva para que se vaya haciendo a 180º durante hora y media aprox.
Mientras tanto, en un cazo calienta unas semillas de cilantro y un anís. A continuación le añades el zumo de las naranjas sobrantes y el romero y dejas que reduzca a fuego lento unos 40 m. aprox. . Cuando pase ese tiempo, le añades la miel y dejas que reduzca un poco más. Con esta salsa debes ir pintando el pollo poco a poco y por las dos caras.
Cuando el pollo esté listo, pásalo a una bandeja de servir, reduce la salsa y vuélcala por encima del pollo. Espolvorea con un poco de ralladura de naranja.